-

Y me dí cuenta por qué; ahora me falta.
Y no se como rendir homenaje, ya no entiendo... por un lado quiero mostrar, por otro aparentar.
Años, increible! Ya me mudé, ya crecí, ya tomé, ya hablé, ya cambié, ya cambiaron mis cosas, mi cuarto, mi pelo, mis amigos, mi ciudad, mi letra, mi gusto por las cosas, mi pensamiento sobre las mismas... pero ese sentimiento siempre está igual, el recuerdo siempre está ahí y la memoria lo conserva lo mejor que puede; lamentablemente sigo sin entender algunas cosas, algunos motivos... lamentablemente también, entiendo las consecuencias.


No, no tengo ganas de escribir: es tarde, estoy triste, intentando dormir en la rural azul con mi hermano mayor, pensando en la charla que acaba de darme, en las que me dieron los otros, pensando en los hechos y aceptandolos y, sobre todo, preocupada y asustada por todo lo que se viene, que siguió hasta hoy.